Ravelli declina toda responsabilidad por compras efectuadas a Distribuidores no autorizados o por productos instalados por Centros de Asistencia no acreditados, que podrían no utilizar componentes originales.

Mantenimiento y limpieza de la estufa: preguntas frecuentes
Para garantizar el buen funcionamiento y una larga vida útil de la estufa, es esencial seguir una rutina regular de mantenimiento y limpieza.
En esta sección, hemos enumerado toda la información que necesita para cuidar de su estufa, desde la limpieza rutinaria hasta consejos para un mantenimiento más exhaustivo. Siga nuestros consejos para mantener su estufa eficiente y segura.

¿Cómo limpiar la estufa de pellets?
Para llevar a cabo la inspección y limpieza rutinarias de la estufa de pellets, es conveniente seguir los siguientes pasos:

1. Apague la estufa y deje que se enfríe completamente.
2. Vacíe el cajón de las cenizas.
3. Limpie el cristal con un paño húmedo y productos especiales.
4. Aspire el interior de la estufa y limpie los conductos de humos.
   Para una limpieza a fondo, le recomendamos que se ponga en contacto con un técnico cualificado de un Centro de Asistencia Ravelli.

¿Con qué frecuencia al año debe realizar el mantenimiento de su estufa?
Para mantener su estufa de pellets en excelentes condiciones, es aconsejable realizar el mantenimiento dos veces al año:

1. Pretemporada: antes del inicio de la temporada de frío, para preparar la estufa para un uso intensivo.
2. Post-temporada: al final de la temporada de uso, para limpiar y preparar la estufa para el periodo de inactividad.
   También es bueno limpiar la estufa cada semana durante el uso intensivo.

La chimenea, por su parte, debe limpiarse al menos una vez al año, preferiblemente antes del inicio de la temporada de frío. Si la estufa se utiliza de forma intensiva, puede ser necesario limpiarla dos veces al año.

¿Qué ocurre si no se realiza el mantenimiento?
Si no se realiza un mantenimiento regular de la estufa de pellets, pueden producirse varios problemas:

1. Reducción de la eficiencia: la estufa puede perder eficiencia, consumiendo más pellets para producir la misma cantidad de calor.
2. Acumulación de residuos: la ceniza y los residuos pueden acumularse, obstruyendo el flujo de aire y reduciendo la combustión.
3. Mayor riesgo de averías: las piezas desgastadas o sucias pueden provocar fallos de funcionamiento o averías repentinas.
4. Deterioro de la seguridad y el funcionamiento: un sistema de escape obstruido puede aumentar el riesgo de incendio o de emisiones de monóxido de carbono.
5. Reducción de la vida útil: la vida útil de la estufa puede reducirse significativamente debido a la falta de cuidado y mantenimiento regulares.

Para evitar estos problemas, es esencial realizar un mantenimiento regular y programar una visita a un Centro de Servicio Ravelli para operaciones complejas.

¿Cómo reducir el consumo de una estufa de pellets?
Para reducir el consumo de una estufa de pellets, tenga en cuenta lo siguiente:

1. Utilizar pellets de alta calidad: el uso de combustible de alta calidad mejora la eficiencia de la combustión.
2. Realizar un mantenimiento regular para mantener la estufa limpia y funcional.
3. Optimizar los ajustes según el modelo adquirido: como la regulación de la temperatura y la ventilación.
4. Aislar bien la casa: reduce la pérdida de calor, lo que permite que la estufa funcione menos.

¿Por qué se apaga de vez en cuando la estufa de pellets?
Las causas más comunes por las que se apaga la estufa de pellets son:

1. Mantenimiento insuficiente: los residuos y la ceniza pueden obstruir la rejilla.
2. Sensores sucios o que funcionan mal: los sensores deben limpiarse regularmente.
3. Fallos de alimentación: problemas con el suministro de pellets o la fuente de alimentación.
   Le recomendamos que se ponga en contacto con el técnico más cercano mediante el selector de región que figura a continuación.